¿Por qué toda la organización tiene que participar en una estrategia de resiliencia financiera?

Primer plano de una persona que mantiene en equilibrio una tabla de madera sobre un punto de apoyo circular, con montones de monedas en un lado. La imagen simboliza la estabilidad y la planificación financiera. Se muestran los logotipos de COMETA y ECOS. Representación de una estrategia de resiliencia financiera para organizaciones de la sociedad civil.

Uno de los aspectos clave para la sostenibilidad de una organización e indicador de su salud tiene que ver sin duda con sus finanzas y con la movilización de recursos. Si bien no hay una receta única, tener una estrategia de resiliencia financiera es un primer paso importante. Una estrategia que tome en cuenta las necesidades, las especificidades y el contexto de nuestra organización.

Arianna Bizzoni, Consultora senior en Colectivo Meta.

Para COMETA, una estrategia de resiliencia financiera es la capacidad de las organizaciones de estimar nuestras necesidades financieras, de recaudar fondos para cubrir los costos reales y de adaptarnos al contexto y a la disponibilidad actual de fondos. 

Es decir, podemos hablar de resiliencia financiera cuando un proceso se enfoca en:

  • Identificar las necesidades reales de nuestra organización para operar de manera óptima.
  • Aprender sobre las diversas fuentes de financiamiento y sobre las que más se alinean con las necesidades de nuestra organización. 
  • Fortalecer la comunicación con donantes y aliadas para mantener donantes actuales y para atraer otros potenciales.  
  • Establecer que la movilización de recursos es una responsabilidad compartida entre todas quienes integramos a la organización.

Existen varios modelos de movilización de recursos para las organizaciones de la sociedad civil en el que cada una se va adaptando de acuerdo a su tamaño, capacidad, objetivos. En algunas hay área de desarrollo institucional, en otras, hay una persona encargada de la recaudación de fondos, y otras veces el modelo es descentralizado. 

La estrategia de resiliencia financiera de una organización es una responsabilidad entre varias personas y una buena práctica para la sostenibilidad financiera. Tener un balance interno para que varias personas del equipo podamos aportar a las tareas de procurar, gestionar y rendir cuentas sobre los financiamientos que recibe nuestra organización. 

Entonces, ¿a quiénes involucrar en una estrategia de resiliencia financiera?

1. Personal de las áreas programáticas y de las áreas funcionales. 

Un aspecto clave de una estrategia de resiliencia financiera exitosa es que haya una fuerte colaboración y coordinación entre las áreas programáticas y las áreas funcionales de una organización. Es decir, entre el personal que lleva a cabo el trabajo sustantivo de una organización (incidencia, acompañamiento, capacitación etc.) y el personal que permite y sostiene este trabajo sustantivo (administración, desarrollo institucional, comunicación etc.). 

Esta colaboración se tiene que dar no sólo para el diseño, sino también para la solicitud, gestión y rendición de cuentas de propuestas de financiamiento. De esta manera se puede asegurar que:

  • Los proyectos se elaboran teniendo en cuenta las necesidades reales de las actividades y del personal involucrado.
  • Los fondos se gasten y justifiquen de acuerdo a los lineamientos y requerimientos específicos de los donantes. 

Sin embargo, para que esta colaboración funcione y se fortalezca la estrategia de resiliencia financiera de una organización, es muy importante que las tareas relacionadas a la movilización de recursos sean explícitas en las descripciones de puesto. Así, el personal involucrado puede integrar oportunidades de colaboración y coordinación entre las diversas áreas. 

2. Área de comunicación. 

    El área de comunicación tiene un importante rol en una estrategia de resiliencia financiera. 

    Cada vez más la recaudación de fondos se busca a través de herramientas digitales. Hay organizaciones que crean sus propias plataformas digitales para dar visibilidad a su trabajo y para llevar a cabo campañas de crowdfunding. Otras organizaciones aprovechan las posibilidades de recaudación que algunas redes sociales permiten, como TikTok por ejemplo. Para estas “nuevas” fuentes y modalidades de recaudación se requieren equipos de comunicación fuertes y alineados con las demás personas involucradas en la estrategia de resiliencia financiera. 

    3. Liderazgo. 

      Otro aspecto clave de una estrategia de resiliencia financiera exitosa es el involucramiento de la dirección ejecutiva o puesto equivalente. Su función principal es establecer relaciones con donantes, abrir puertas y lograr fondos. Al ser la representación de una organización, este liderazgo puede tener acceso e interlocución con una gran variedad de actores entre ellos, los donantes. 

      En este sentido, es importante considerar que el liderazgo no tiene que trabajar a solas en estos procesos. La buena práctica es que el liderazgo genere la relación y la oportunidad de financiamiento, pero no elabore las propuestas para traer fondos. Esta tarea específica tiene que ser asumida por otras personas de la organización. 

      Conclusión

      Una estrategia de resiliencia financiera efectiva requiere la participación activa y coordinada entre áreas programáticas y funcionales de una organización. La colaboración es esencial para alinear las necesidades operativas con las exigencias de los donantes, mientras que la inclusión de tareas relacionadas con la movilización de recursos en las descripciones de puesto fortalece su implementación. 

      Este enfoque integral y colaborativo nos permite responder a nuestras necesidades financieras reales y adaptarnos a un entorno cambiante, garantizando nuestra sostenibilidad a largo plazo, es decir nuestra resiliencia financiera.
      ¿Y tu organización, tiene una estrategia de resiliencia financiera? Te compartimos los 10 riesgos para la salud financiera de las organizaciones de la sociedad civil. En caso de tener dudas, recuerda que en COMETA te podemos ayudar en cualquier momento. Contáctanos.