¿Cómo plantear objetivos SMART?

Los objetivos SMART buscan generar mejoras a largo plazo, contribuyendo a la misión de nuestra organización en los siguientes años.

Establecer metas es una parte esencial de nuestro viaje hacia el éxito como organización civil. Sin embargo, no todas las metas son creadas de igual manera ni alcanzadas con el mismo éxito. Para maximizar nuestras posibilidades de éxito, es crucial plantear objetivos de manera inteligente y estratégica. Una buena forma de lograrlo es a través de la metodología SMART, una herramienta poderosa que te ayudará a definir metas con claridad y alcanzar tus sueños de manera efectiva.

Sigue leyendo y descubre de qué se trata esta herramienta y cómo sacarle el máximo provecho.

¿Qué son los objetivos SMART?

Los objetivos SMART buscan generar mejoras a largo plazo, contribuyendo a la misión de nuestra organización en los siguientes años. Como tal, son cambios de mediano plazo que proporcionan una visión más detallada del cambio que buscamos; son pasos que nos permiten acercarnos poco a poco la misión de nuestra organización.

SMART es un acrónimo (tomado del idioma inglés) que se desglosa en cinco características clave:

  • Específico
  • Medible
  • Alcanzable
  • Realista
  • Acotado en el tiempo

Cada uno de estos componentes juega un papel fundamental en la creación de objetivos efectivos y realistas.

1. Específico: define claramente tu meta

Al momento de plantear los objetivos SMART de tu organización es crucial que sea lo más específico posible. Esto significa que debes responder a las preguntas fundamentales: ¿Qué buscamos lograr? ¿Por qué es importante? ¿Cómo lo haremos?

Un buen ejemplo es:

“Para el 2023, nuestra organización aumenta el número de prestadores de servicios de aborto que acompañamos y se asegura de que están utilizando las evidencias que generamos para prevenir el embarazo no deseado y el acompañamiento al aborto.”

2. Medible: Cuantifica el progreso

La medición es clave para evaluar el avance que nuestra organización va logrando en las metas establecidas. Un objetivo medible te permite determinar con precisión cuánto progreso has hecho y cuánto te falta para alcanzar tu meta. Esto no sólo te permite evaluar tu avance, sino que también te motiva al ver tus logros de manera cuantitativa.

La forma de cuantificar va a depender del objetivo planteado y sus propias características pero es importante no pasarlo por alto.

3. Alcanzable: Analiza las oportunidades del contexto

Aunque soñar en grande es inspirador, al establecer los objetivos SMART de tu organización es crucial que tus metas sean alcanzables y realistas. Para que tus objetivos sean realmente asequibles debes considerar todos esos factores externos e internos que te ayudarán a alcanzar tus objetivos o que, por el contrario, son retos importantes que tienes que enfrentar. La parte “alcanzable” del objetivo se refiere a un análisis de las oportunidades y retos que nos marca el contexto.  ¿Hay un ambiente favorable para lograr cambios en los temas que queremos? ¿El tema está en la agenda pública y de los gobiernos? ¿Hay otras organizaciones o interlocutores trabajando en el mismo tema? ¿Hay condiciones para asegurar que vamos a poder cumplir con nuestras metas y que vamos a poder garantizar nuestra seguridad y la de nuestro equipo? Muchas veces obviamos este análisis, porque nos entusiasma poner en práctica nuevas estrategias o porque creemos que las condiciones no cambian tan rápidamente, pero esto es un error que debemos evitar a toda costa. Saltarnos este análisis sería tan grave como que un capitán de barco no conociera a detalle los pronósticos sobre el clima antes de zarpar. ¡No podemos lanzarnos al mar con un velero cuando todo indica que habrá tormenta!

4. Realista: Alinea tus metas con tus recursos y capacidades 

La parte “realista” de los objetivos SMART se refiere a la necesidad de considerar las habilidades, recursos y limitaciones con las que cuenta nuestra organización antes de establecer un objetivo. ¿Tenemos los conocimientos para cumplir con lo que nos planteamos?¿Contamos con recursos humanos, financieros y de tiempo para hacer las actividades que requieren nuestras metas? 

Es común que las organizaciones se detengan o se desanimen porque consideran que les faltan recursos para lograr sus metas. Incluso si ese es el caso, plantear objetivos SMART es el primer paso para avanzar. Una vez que se tienen los pasos a seguir, es posible encontrar alternativas con los recursos existentes para llegar a donde deseamos o también podremos diseñar estrategias para allegarnos de esos recursos que nos hacen faltan.

5. Acotado en el Tiempo: Establece un Plazo Realista

Al momento de plantear objetivos SMART es común caer en la tentación de dejarnos llevar por la emoción. Como resultado, podemos encontrarnos con objetivos poco realistas. Para evitarlo, es necesario que cada objetivo tenga un plazo definido para que no quede en el olvido. Establecer un tiempo límite nos proporciona una estructura temporal que nos ayuda a mantenernos enfocados y comprometidos con nuestra meta. 

Es importante que el plazo no sea tan grande como para olvidarlo ni tan corto que sea imposible  de lograr. Una buena estrategia es fijar metas grandes y luego dividirlas  en metas más pequeñas.

Conclusión.

Plantear objetivos SMART es una herramienta invaluable para alcanzar el éxito en cualquier área de nuestra organización.  Diseñar objetivos  específicos, medibles, alcanzables, realistas  y con un tiempo definido, nos dará la estructura necesaria para convertir nuestros ideales en realidades tangibles.

Es importante tomar en cuenta que nuestras metas deben ser flexibles y ajustables a medida que avanzamos. También es buena idea celebrar nuestros logros, incluso si parecen muy pequeños.

En caso de que los objetivos SMART no se puedan alcanzar por completo, siempre es buena idea replantear y aprender de los desafíos hallados. Si todo sale bien y tu organización logra cumplir todas sus metas, una buena práctica es continuar adaptando sus objetivos para reflejar su crecimiento y evolución. 

La forma y la fuerza del impacto que buscas dejar están determinadas, en gran medida, por la manera en que defines y redefines los objetivos que quieres alcanzar a lo largo del camino hacia el cambio social. Usando herramientas como los objetivos SMART —y muchas otras con las que  podemos asesorarte—, tu organización estará mejor preparada y equipada para establecer, medir y conseguir las metas que aspiran a cumplir colectivamente, enfrentar sus desafíos y lograr el éxito deseado.

En caso de necesitar ayuda para plantear estos objetivos o alcanzarlos, recuerda que en COMETA te podemos asesorar.